Tal como explica el presidente del colectivo, José Luis Benedito Castellote, se trata de una normativa “que, en su concepción original, resulta razonable ya que, evidentemente, es necesario que exista un control total sobre estos medicamentos de uso humano”. No obstante, “la aplicación en la Veterinaria viene derivada de que no hay alternativas específicas para animales que los sustituyan”, de modo que “ese exhaustivo seguimiento no puede ser nunca incompatible con la atención de las urgencias que surjan”.
En este sentido, Benedito explica que “la exigencia de una receta individualizada para cada paciente, así como la obligatoriedad de desechar los restos que pudieran quedar de un uso previo impiden a las clínicas y hospitales veterinarios disponer de stock”, una cuestión “imprescindible” para atender urgencias “con garantías de poder salvar vidas de mascotas”. De esta manera, el representante de los veterinarios lucenses explica que “a un perro que entre en parada cardíaca no podemos suministrarle adrenalina sin que previamente se lo pidamos a la farmacia y, a su vez, esta lo solicite a su distribuidor”, lo que supone “una pérdida de tiempo que, literalmente, puede resultar vital”, especialmente en aquellos casos de emergencias producidas de noche.
Esta situación, que también afecta a todos los medicamentos intravenosos inyectables, como el paracetamol, la furocemida, omeprazol intravenoso, midazolán, lidocaína u otros tratamientos, implica una incidencia sobre “medicamentos de uso común y a los que los compañeros tienen que recurrir a diario”, señala Benedito.
No obstante, “hay apartados de esta normativa que nos parecen apropiados, como la presentación de memoria de instalaciones o de equipamientos para utilizar tratamientos quimioterápicos”, señala el presidente de los veterinarios lucenses, al tiempo en que incide en que “en todas aquellas situaciones programables, como puede ser por ejemplo un tratamiento de quimioterapia, este decreto no presenta mayor problema”.
SOLICITUD DE REUNIÓN AL CONSELLEIRO DE SANIDADE
Tras la preocupación detectada en el sector por la entrada en vigor de este Decreto, publicado en el Diario Oficial de Galicia del 11 de marzo, la Junta Directiva liderada por José Luis Benedito Castellote solicitará formalmente una reunión al nuevo Conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, para abordar cambios en este reglamento.
“Entendemos que sea necesario ese control y somos los primeros interesados en que haya un uso racional de este tipo de medicamentos, pero esa exhaustividad nunca puede vulnerar nuestro derecho profesional a tratar ni tampoco el de nuestros pacientes a ser tratados”, concluye el presidente de los veterinarios lucenses.
La obesidad es un problema cada más vez acuciante entre los perros y gatos. Según un estudio del Royal Veterinary College (RVC), en Reino Unido 1 de cada 14 perros sufren sobrepeso cada año. En muchas ocasiones, el motivo principal de la consulta de las mascotas al veterinario no suele ser el problema relacionado con el sobrepeso en sí, sino que, al acudir por otra causa, es el veterinario quien tiene que indicar al cuidador la importancia de que su mascota baje de peso, y establecer el programa dietético oportuno.
Por ello, es importante que “se conozca que frente al exceso de peso hay que tomar medidas cuanto antes”, defienden los profesionales de Virbac. Esta condición es, en parte, una cuestión que está mayormente relacionada con la dieta de los animales. “Se puede deber a un exceso de cereales y almidón que se ha convertido en un habitual de los alimentos para perros y gatos”, explican.
Perros y gatos son carnívoros, por lo que su alimentación debería basarse en alimentos que mayoritariamente contengan proteína de origen animal, y en menor medida de hidratos de carbono. “Algunos alimentos en cambio tienen un porcentaje de hidratos de carbono muy alto, lo que además de no ser el alimento ideal para un carnívoro, es el responsable de ese aumento de la obesidad y otras enfermedades relacionadas”.
Además, según apuntan, también influye el estilo de vida, especialmente el sedentarismo y la falta de estimulación mental y juego, la edad, el sexo, la raza, si el animal está castrado o no, así como la existencia de patologías endocrinas que predisponen a un aumento de peso como el hipotiroidismo o el hiperadrenocorticismo.
Una de las patologías que sufren las mascotas con mayor frecuencia y que está relacionada con el sobrepeso es la diabetes mellitus. La obesidad es un factor, según apuntan desde Virbac, “predisponente a la hora de desarrollar diabetes, ya que genera resistencia a la insulina. Si perros y gatos ingieren alimentos ricos en hidratos de carbono, el aumento de glucosa en sangre que se produce tras comer estimula una producción excesiva de insulina por parte de las células pancreáticas y, por tanto, favorece la aparición de resistencia a la insulina, aumentando las posibilidades de desarrollo de diabetes mellitus”. Así, para evitar la diabetes, señalan que es importante el manejo dietético, ofreciendo a perros y gatos un alimento rico en proteínas, y por otro lado es fundamental evitar el sobrepeso.
Otra de las enfermedades a las que se pueden enfrentar los perros y gatos con problemas de sobrepeso es la pancreatitis, una inflamación grave del páncreas. Los perros pueden padecerla por una serie de factores predisponentes entre los que se encuentra la obesidad y la ingesta a largo plazo de dietas ricas en grasas.
También pueden sufrir, al igual que ocurre en las personas, problemas articulares. “Un mayor peso corporal de nuestros animales produce una sobrecarga de sus articulaciones y ligamentos, pudiendo ocasionar también daño en los tejidos blandos. Además, los animales mayores suelen desarrollar artrosis, la cual empeora si existe obesidad al aumentar las fuerzas de compresión sobre las articulaciones”, indican.
Además, es probable que las mascotas con sobrepeso padezcan enfermedades del tracto urinario, especialmente en los gatos, ya que la obesidad predispone a las infecciones y enfermedades del tracto urinario. “Un gato o perro obeso, tiene más dificultad para moverse por lo que irá con menos frecuencia a su arenero, o tendrá menos ganas de salir a la calle, por lo que habrá una mayor retención de orina, concentración de la misma, y tendencia a un mayor desarrollo de cálculos urinarios”.
Y, en último lugar, enfermedades cardiovasculares y respiratorias. “En animales con sobrepeso se produce un incremento de la frecuencia cardíaca, el corazón tiene que hacer un sobreesfuerzo por bombear la sangre y enviarla al resto del cuerpo, y puede derivar en un aumento de las paredes ventriculares, así como en hipertensión. Por otro lado, la obesidad produce intolerancia al ejercicio y dificulta la correcta función respiratoria”.
LA DIETA, LA CLAVE DEL ÉXITO
Existen diferentes formas y herramientas para poder ayudar a perros y gatos a perder peso. Una de las que disponen los dueños es la relacionada con la alimentación. Tal y como señalan los profesionales de Virbac, “combinar una vida más activa con el manejo de la dieta es la clave del éxito”.
Los expertos recomiendan los alimentos ricos en proteína de origen animal y con baja cantidad de hidratos de carbono.
El sistemático adelanto de la presencia de la procesionaria del pino (Thaumetopoea pityocampa) del comienzo de la primavera al final de invierno está convirtiendo la excepción en nueva norma. El temprano inicio de las altas temperaturas y la escasez de lluvias, consecuencias directas del cambio climático, están provocando tanto una mayor intensidad de la plaga de la procesionaria del pino como un adelanto de su presencia en los últimos años.
Además del cambio climático, otro de los factores que justifica el incremento en la intensidad de esta plaga, tal y como explica el director general de la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla), Jorge Galván, es el progresivo aumento de las restricciones a nivel legal en el uso de productos biocidas que se venían empleando para su gestión y que en la actualidad han quedado reducidos a un único tratamiento posible: la endoterapia. “La endoterapia es una técnica de control de la procesionaria del pino que, si bien es muy efectiva y respetuosa con el medio ambiente, su coste constituye un factor limitante para el tratamiento de grandes masas arbóreas”, afirma Galván.
Desde Anecpla recuerdan la importancia de estar alerta ante la posible presencia de este tipo de insectos que, "con las temperaturas primaverales que se están dando en prácticamente todo el territorio nacional, no tardarán en comenzar su característico descenso, unas detrás de otras, por los troncos de los árboles, con todo el riesgo que su presencia conlleva".
Y es que un mínimo contacto con esta especie puede generar desde dermatitis a lesiones oculares, pasando por urticarias y reacciones alérgicas. “Ni siquiera es necesario el contacto directo con las orugas”, explica Galván, “ya que cuando éstas se sienten amenazadas lanzan sus pelos al aire, lo que genera irritaciones y alergias, especialmente si éstos alcanzan, por ejemplo, los ojos”. Estas vellosidades son las llamadas “tricomas”. Cada individuo posee alrededor de 500.000 tricomas, listas para ejercer a modo de dardos envenenados en el momento en sientan que se encuentran en peligro.
RIESGOS EN ANIMALES DE COMPAÑÍA
“Un mínimo contacto con ellos puede generar desde dermatitis a lesiones oculares, pasando por urticarias y reacciones alérgicas debido a la liberación de histamina. En el caso de los animales de compañía, especialmente de los perros, este contacto puede llegar incluso a ocasionarles la muerte”, alerta.
Algunos de los principales síntomas del contacto con la oruga que los perros pueden manifestar son inflamación del hocico y cabeza, picores intensos en las partes afectadas y abundante salivación. En caso de que lleguen a comérselas, la ingestión del tóxico que lleva el insecto puede provocar la necrosis de lengua y garganta, y, a consecuencia de ello, la muerte del animal.
A fin de evitar los problemas que conlleva sufrir una plaga de procesionaria cada año, recomiendan sistematizar los tratamientos de control y prevención de esta especie. Y destaca la importancia de que sea una empresa de gestión de plagas quien lleve a cabo este servicio de forma profesional, a partir de la toma en consideración de factores tan relevantes como el ciclo biológico en el que se encuentre la plaga, las condiciones ambientales, el nivel de infestación o la minimización del posible impacto sobre el medio, los animales y el ser humano.
Durante este periodo estival, muchas personas deciden que las mascotas van a formar parte del viaje, si bien, hay algunos aspectos a considerar antes de la salida.
Sarah Peakheart, profesora de la Facultad Veterinaria de la Universidad de Oklahoma, considera que es necesaria la visita al veterinario antes de realizar cualquier viaje con la mascota. “En la cita con el veterinario, puede actualizar los tratamientos preventivos de su mascota, como el control de parásitos internos y externos, la rabia y otras vacunas que pueden recomendarse según sus planes de viaje y destino”.
Además, se puede aprovechar la visita para hacer acopio de todos los medicamentos que la mascota pueda estar tomando. “También se debe preguntar si su mascota necesita medicamentos contra la ansiedad o las náuseas para el viaje”.
Por otro lado, resulta de interés “obtener una copia de los registros médicos, para tenerlos a manos en caso de emergencia o enfermedad repentina”.
Otro aspecto a tener en cuenta antes de cualquier viaje, es tener a punto la identificación mediante microchip. “Haga que su veterinario escanee ese microchip para confirmar que funciona. Asegúrese de que su mascota tenga identificación por chip. El microchip es el mejor sistema, ya que los collares o etiquetas pueden perderse o ser robados”, indica.
También conviene actualizar los datos de contacto antes de realizar el viaje, por si el propietario hubiera cambiado de número de teléfono o de dirección.
No obstante, si bien los microchips son más seguros, requieren un escáner especial para su lectura. Estos dispositivos suelen estar en manos de profesionales veterinarios, o cuerpos de seguridad, como policías.
Por esta razón, aunque los collares y las etiquetas se pueden perder, “no requieren un lector y pueden resultar eficaces para una identificación inmediata por parte de cualquier persona”, comenta la veterinaria. En este sentido, recomienda usar “placas identificativas con el nombre del propietario, el nombre de la mascota, el número de teléfono y la dirección son importantes para la identificación inmediata”.
Por último, aconseja realizar una verificación del ajuar del animal, como collares, juguetes, comida, cama, complementos o bolsas para las deposiciones. Asimismo, “conviene elaborar una lista de clínicas veterinarias cercanas de urgencia, tanto durante la ruta, como en el lugar de destino”.
Los expertos en comportamiento y bienestar felino de la Universidad de Nottingham Trent también descubrieron que prestar mucha atención al comportamiento y el lenguaje corporal de los gatos y pensar en dónde acariciarlos era clave para mejorar las interacciones entre gatos y personas.
Desarrollaron un conjunto simple de pautas de interacción y descubrieron que cuando se seguían, los gatos tenían menos probabilidades de comportarse de forma agresiva con las personas y también eran más cariñosos.
Lauren Finka, investigadora principal del estudio de Nottingham Trent University, trabajó en colaboración con la organización benéfica de bienestar animal Battersea para desarrollar la guía para los propietarios y el personal de centros para abordar el hecho de que muchas personas luchan por reconocer cuándo los gatos no disfrutan de ser acariciados.
La guía y los consejos siguen un simple acrónimo "CAT" que anima a las personas a proporcionar al gato opciones y control (C), prestar atención (A) al comportamiento y lenguaje corporal del gato y pensar en dónde están tocando (T) al gato.
Los gatos no tienen la reputación de ser las criaturas más cariñosas, y varios estudios sugieren que la agresión hacia las personas no es infrecuente, particularmente durante las interacciones sociales entre los gatos y sus dueños. En uno de estos estudios, casi la mitad de los propietarios informó de agresividad de los gatos.
PRESTAR ATENCIÓN AL COMPORTAMIENTO
Según Finka, brindarle al gato opciones y control es clave para garantizar que se sienta feliz y cómodo durante las interacciones. Esto incluye ofrecer suavemente una mano al gato y dejar que decida si quiere interactuar o no, lo que generalmente se indica cuando se frota contra la mano de la persona. Los dueños deben permitir que el gato se aleje si así lo desea, y no tener la tentación de levantarlo o seguirlo, ya que esto le quita el sentido de control al gato.
Las personas también deben prestar mucha atención a las reacciones de comportamiento de sus gatos: si giran la cabeza o se alejan durante la interacción, sus orejas giran o se aplanan, sacuden la cabeza o se lamen la nariz, el pelaje a lo largo de su espalda parece 'ondular' o su cola 'agita' rápidamente y luego tomarlo como señales de que el gato puede necesitar un pequeño descanso de las caricias. Del mismo modo, si el gato se queda un poco quieto, deja de ronronear o frotarse contra ti, de repente comienza a acicalarse o gira bruscamente la cabeza para mirarlo, es poco probable que quiera recibir más caricias.
Y en términos de dónde a los gatos les gusta que los acaricien, la mayoría de los gatos amigables preferirán la base de las orejas, alrededor de las mejillas y debajo de la barbilla. Generalmente es recomendable evitar la barriga y la base de la cola y tener cuidado al acariciar el lomo, aunque cada gato tendrá preferencias individuales, por lo que la clave es prestar mucha atención a cómo responde cada gato cuando se tocan estas áreas.
ESTUDIO
Como parte del estudio, el equipo monitoreó las breves interacciones de los participantes con 100 gatos alojados en el centro de Battersea en Londres, estudiando el comportamiento y la postura de los gatos. Cada participante interactuó con seis gatos, tres antes de recibir capacitación sobre las pautas "CAT" y tres después.
Descubrieron que era mucho menos probable que los gatos mostraran signos de incomodidad o se comportaran de manera agresiva cuando las personas seguían las pautas de "CAT". Era menos probable que los gatos silbaran, golpearan o parecieran ansiosos o frustrados durante las interacciones con los participantes. Los gatos negaban con la cabeza, agitaban sus colas y rotaban o aplanaban menos sus orejas y era menos probable que se acicalaran rápidamente, se "congelaran" o adoptaran una postura agachada o tensa.
Los mismos gatos también eran más propensos a mostrar comportamientos amistosos hacia los participantes y a parecer más cómodos durante las interacciones que ocurrieron después del entrenamiento, encontraron los investigadores. Los gatos se frotaban contra los participantes y "agitaban" la cola con más frecuencia, mantenían sus orejas en una posición "hacia adelante" o "neutral", "amasaban" con las patas y también olfateaban a las personas durante más tiempo.
A pesar de la popularidad mundial de los gatos como animales de compañía y su creciente inclusión en las "intervenciones asistidas por animales" y el turismo basado en animales, como los cafés para gatos, se ha realizado poca investigación para comprender cómo los gatos prefieren interactuar con ellos, lo que inadvertidamente puede comprometer su bienestar.
Las pautas están destinadas a ser simples pero efectivas para ayudar a mejorar la comodidad y el bienestar de los gatos durante las interacciones con las personas, así como a reducir el riesgo de lesiones humanas. Están diseñados para ser genéricas y, por lo tanto, podrían usarse en cualquier contexto en el que las personas acaricien e interactúen con gatos, ya sea en el hogar, en un centro de reubicación o durante eventos organizados de manera más formal, como las intervenciones asistidas por animales.
"Los resultados demuestran una clara preferencia entre los gatos por un enfoque más 'sin manos' de las caricias, lo que finalmente les permite tomar la mayor parte de las decisiones", cuenta Finka, especialista en comportamiento y bienestar de los gatos en la Universidad de Nottingham Trent.
"Estas sencillas pautas" CAT "están diseñadas para garantizar que los gatos nunca se sientan abrumados durante las caricias y que las personas estén conscientes de dónde, cómo y cuánto acarician a los gatos. También alientan a las personas a estar atentas a algunos signos de comportamiento sutiles clave de incomodidad del gato y a responder en consecuencia a ellos, en lugar de esperar hasta que el gato se comporte de manera agresiva antes de darle un descanso”, añade.
Desde la Organización Colegial Veterinaria (OCV) señalan que “el uso de medicamentos en animales sin el control de un veterinario pone en riesgo tanto su salud como la de sus propietarios, pero también puede tener graves efectos secundarios en el resto de los animales, personas e, incluso, comprometer la salud del medio ambiente en el que vivimos”.
La mayoría de los medicamentos veterinarios necesitan prescripción, que debe estar siempre hecha por un profesional veterinario después de haber realizado un diagnóstico. El uso y administración incorrecta de los fármacos es una de las principales causas de la resistencia a los antibióticos, que se ha convertido en uno de los problemas de salud pública más graves en la actualidad.
“La resistencia a los antibióticos supone uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta la salud pública en el siglo XXI, y si no se toman medidas eficaces los expertos prevén que en 2050 la cifra de fallecidos ascienda hasta los 10 millones en todo el mundo”, señalan desde la OCV.
Además, destacan que “las bacterias desarrollan mecanismos que les permiten resistir a los antibióticos, por lo que cuantos más antibióticos utilicemos de una forma no responsable, más rápido se harán las bacterias resistentes a ellos”.
REDUCCIÓN DEL 59 % EN EL USO DE MEDICAMENTOS VETERINARIOS
Desde el año 2014, a través de la estrategia Plan Nacional Resistencia Antibióticos (PRAN), se ha trabajado en la disminución del consumo de antibióticos y la necesidad de usarlos. La impecable labor de los veterinarios en este ámbito ha hecho posible reducir el uso de antibióticos veterinarios en más de un 59 % gracias al trabajo realizado en áreas como la prevención, investigación o bioseguridad.
En cuanto a los medicamentos sin prescripción, en principio no necesitan la emisión de una receta por parte del veterinario. Sin embargo, es fundamental que la administración de esos medicamentos la supervise un facultativo, ya que pueden generar efectos secundarios graves en los animales.
“El veterinario no solo es responsable de garantizar la salud y el bienestar de los animales a través de un tratamiento adecuado, sino que haciendo un uso responsable de los medicamentos protege además la salud de personas y el medio ambiente”, concluyen desde la OCV.
A través un vídeo en el que expertos en la materia explican la importancia de usar los medicamentos veterinarios de una forma adecuada, la OCV incide en la importancia de que la administración de medicamentos siempre esté supervisada por un profesional veterinario.
Sin embargo, desde las últimas semanas, en la web de la Organización Mundial para la Salud Animal (OIE), no se han publicado nuevos casos de SARS-CoV-2 en perros o gatos testados por PCR o aislamiento de virus.
LA PRIMERA VACUNA PARA MASCOTAS
La mayoría de los esfuerzos sobre el SARS-CoV-2 en el último mes se han centrado en los empeños mundiales para vacunar a un gran volumen de personas. Sin embargo, el 31 de marzo, Rusia anunció que había aprobado la primera vacuna COVID-19 para mascotas del mundo.
La vacuna, conocida como Carnivac-Cov, se sometió a ensayos clínicos en perros, gatos, visones y otros animales. Según los desarrolladores de vacunas, todos los animales probados desarrollaron anticuerpos contra el coronavirus, y que llevaron a la conclusión de que la vacuna es inofensiva y tiene una alta inmunogenicidad. En la última actualización de abril, WSAVA explica que la agencia gubernamental que desarrolla la vacuna explicó que las dosis podrían estar ampliamente disponibles en unos meses.
Según el Servicio Federal de Supervisión Veterinaria de Rusia, se requería una vacuna para mascotas como seguro contra variantes que pudieran propagarse más fácilmente. “La agencia dijo que había desarrollado la vacuna para animales, en parte como una herramienta de salud pública en caso de que el virus se propagara de animales a humanos o, en el peor de los casos, mutara en animales y luego se propagara a los seres humanos de una forma más virulenta”, comentan desde WSAVA.
En esta línea, la asociación veterinaria considera que “el anuncio de Rusia, y un artículo anterior publicado en enero en el New York Post sugiriendo que podría ser necesaria una vacuna SARS-CoV-2 para perros y gatos, ha alimentado las discusiones de los dueños de mascotas de todo el mundo que ahora se preguntan si su mascota debe ser vacunada contra el virus y si la vacuna es segura”.
Los Asesores Científicos y de Salud de la WSAVA creen que se deben considerar varios hechos relativos a la vacunación de perros y gatos contra el SARS-CoV-2. Las razones principales para vacunar a los animales serían disminuir el potencial de transmisión zoonótica a las personas (de la misma manera que la rabia, por ejemplo), y para disminuir el riesgo de que las mascotas puedan sufrir una enfermedad grave.
Mientras que el SARS-CoV-2 es conocido por infectar varias especies animales, incluyendo perros y gatos, los seres humanos son la principal fuente de la infección. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), actualmente no hay evidencia de que las mascotas desempeñen un papel importante en la propagación del virus a las personas, y el riesgo de que las mascotas propaguen COVID-19 a las personas es bajo. “No ha habido casos en los que se haya demostrado que un perro o un gato transmita el virus a las personas. Por lo tanto, por el momento, no hay una necesidad aparente de una vacuna SARS-CoV-2 para perros y gatos desde un punto de vista de salud pública”, concluyen.
Una catarata es una opacidad en la lente, que enfoca la luz en la retina. En perros, la causa más común de una catarata es la genética. La mayoría de los perros que desarrollan cataratas hereditarias lo hacen cuando son jóvenes o de mediana edad. Criar a un perro con cataratas hereditarias puede llevar a transmitir esta mutación a su descendencia.
La diabetes es la segunda causa más común de cataratas caninas. “Después de un año de ser diagnosticado con diabetes, la mayoría de los perros desarrollarán cataratas avanzadas. Curiosamente, es muy raro que los gatos con diabetes desarrollen cataratas debido a las concentraciones variables entre las especies de enzimas que procesan altos niveles de azúcar en el cristalino”, explica Emily Sharpe, veterinaria oftalmóloga del Colegio Americano de Oftalmólogos Veterinarios.
Una catarata en un labrador retriever con diabetes.
CIRUGÍA PARA ELIMINARLAS
Para eliminar las cataratas y restaurar la visión, la experta señala que se requiere cirugía. “En general, la cirugía de cataratas se recomienda para pacientes con cataratas avanzadas o cataratas que afectan la visión. La cirugía de cataratas en perros se realiza de manera similar a la de las personas, excepto que los perros deben estar completamente anestesiados”.
Si bien, Sharpe asegura que, si no se puede realizar la cirugía, los perros con discapacidad visual aún pueden tener una calidad de vida maravillosa. “Para adaptarse a la pérdida de visión, los perros dependen en gran medida de sus sentidos del olfato, tacto y audición. Pueden hacer ajustes mínimos para asegurarse de que no pueden lesionarse accidentalmente, como evitar escaleras, piscinas, etc. Las cataratas avanzadas pueden provocar inflamación dentro del ojo, por lo que los perros con cataratas deben tratarse con gotas para los ojos antiinflamatorias”, apunta.
Mientras que algunos perros mayores desarrollan cataratas, la esclerosis nuclear es la razón más común para que los perros desarrollen una apariencia turbia en sus ojos. “Un cambio normal de envejecimiento en los perros, la esclerosis nuclear no causa pérdida de visión”, aclara. La compresión de las fibras de la lente y el endurecimiento del centro de la lente dan como resultado una apariencia turbia. Este cambio también ocurre en personas que resultan en presbicia. Esta es la razón por la cual las personas alrededor de los 40 años comúnmente necesitan gafas para leer, ya que su lente ya no es tan “flexible” como lo era antes.
Por último, si le preocupa que el ojo de su perro se vea turbio, la oftalmóloga recomienda consultar a un veterinario “para un examen oftálmológico para determinar la causa y derivarlo a un oftalmólogo veterinario si fuera necesario”.
Los perros entrenados con estímulos aversivos, que implican castigos por comportamientos incorrectos, muestran evidencia de niveles de estrés más altos en comparación con los perros entrenados con métodos basados en recompensas, según un estudio publicado PLOS ONE por Ana Catarina Vieira de Castro, de la Universidad de Porto, Portugal, y sus compañeros.
Los investigadores observaron el comportamiento de 92 perros de 7 escuelas de adiestramiento canino en Portugal que utilizan métodos aversivos, métodos de recompensa (que se centran en recompensar los comportamientos deseados) y métodos mixtos (que combinan el uso de ambos, recompensas y estímulos aversivos). Filmaron sesiones de entrenamiento y analizaron muestras de saliva para detectar la hormona cortisol relacionada con el estrés. Los perros entrenados con métodos aversivos y mixtos mostraron más comportamientos relacionados con el estrés, como agacharse y aullar, y mostraron mayores aumentos en los niveles de cortisol después del entrenamiento que los perros entrenados con recompensas.
Los autores también realizaron una prueba de sesgo cognitivo en un lugar desconocido fuera del entorno de entrenamiento habitual del perro con 79 de los perros, para medir su estado emocional subyacente. Descubrieron que los perros de las escuelas que usaban métodos aversivos respondían de manera más pesimista a situaciones ambiguas en comparación con los perros que recibían un entrenamiento mixto o basado en recompensas.
Estudios previos basados en encuestas y evidencia anecdótica han sugerido que las técnicas de entrenamiento basadas en castigos pueden reducir el bienestar animal, pero los autores afirman que este estudio es la primera investigación sistemática de cómo los diferentes métodos de entrenamiento influyen en el bienestar tanto durante el entrenamiento como en otros contextos. “Estos resultados sugieren que las técnicas de entrenamiento aversivas pueden comprometer el bienestar animal, especialmente cuando se usan con alta frecuencia”, afirman.
La veterinaria e investigadora del CISA-INIA Elisa Pérez-Ramírez comparte toda la información científica sobre Covid-19 en animales recogida hasta el momento, y concluye que el papel de los animales en la transmisión sigue siendo insignificante
Desde que a finales de febrero las autoridades de Hong Kong informaran de un caso positivo en un perro asintomático, se ha venido produciendo un goteo de casos de coronavirus Covid-19 en animales, desde perros, pasando por gatos —dos de ellos en España— , visones, e incluso tigres y leones.
Para ordenar todo lo conocido hasta el momento sobre el coronavirus y los animales, la veterinaria e investigadora del Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA) del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA), Elisa Pérez-Ramírez, ha realizado un recopilatorio de la información científica conocida.
El documento, que es una actualización de otro publicado hace dos semanas, forma parte del proyecto MedilabSecure, que promociona la colaboración trasnacional para la vigilancia de zoonosis en el área mediterránea.
Según los datos de Pérez-Rámirez, hasta el momento se ha detectado ADN del virus mediante la prueba PCR en 11 gatos de Bélgica, Hong Kong, Estados Unidos, Francia, España, Alemania, Holanda y el último de ellos en Rusia, notificado a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) este mismo martes 26 de mayo.
Los gatos estuvieron en contacto cercano con humanos positivos a Covid-19, salvo el caso de Holanda, y la mayoría de ellos mostraron signos clínicos respiratorios y digestivos, aunque al menos 2 de ellos no presentaron síntomas, uno de ellos en España.
Además, el informe indica que en el caso de Holanda se detectaron anticuerpos de coronavirus en 7 gatos —uno de ellos también dio positivo en PCR y está contabilizado en los 11 casos— que pertenecían a una granja de visones que también fueron infectados por coronavirus. De hecho, se sospecha que fueron los visones los que infectaron a los gatos.
Sobre las infecciones en visones, el informe señala que 4 granjas de visones holandesas han notificado en los últimos meses casos de infección en sus animales, tras entrar en contacto con trabajadores infectados. Los animales pueden cursar la infección de manera asintomática, aunque algunos muestran un cuadro digestivo y respiratorio.
La veterinaria comenta sobre este suceso que las investigaciones apuntan a que el virus circuló entre los visones y luego saltó a 2 trabajadores. Además, se está investigando el potencial papel de los gatos como transmisores del virus entre granjas.
Asimismo, señala que este caso supondría una excepción a las infecciones conocidas, que se han producido de humano a animal, debido a que se ha creado un contexto epidemiológico muy concreto con granjas con altas densidades de animales en el que parece que podrían llegar a transmitirse el virus al ser humano.
El informe no se olvida tampoco del resto de animales afectados: 3 perros positivos en PCR en Hong Kong y Holanda, todos sin signos clínicos; así como 3 tigres y 3 leones con síntomas compatibles en un zoo de Nueva York, habiéndose confirmado en PCR un caso en cada uno de los animales.
Además de los casos de campo, el documento también recoge infecciones en laboratorio en distintos animales llevadas a cabo por investigadores chinos, alemanes y estadounidenses, de los que se concluye que los gatos y hurones son muy susceptibles; los hamsters, macacos y murciélagos de la fruta también se pueden infectar; los perros tienen una susceptibilidad baja; y los cerdos, pollos y patos no son susceptibles.
Por último recoge estudios epidemiológicos realizados en Estados Unidos, Hong Kong, Francia, China, España y Holanda en los que se registran unas seroprevalencias en gatos que rondan entre un 10% y un 30%
Desde 2007, cada 28 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Rabia ya que fue en esa fecha cuando falleció Louis Pasteur, químico que creó la vacuna antirrábica en el año 1895. La vacuna es, junto con otras formas de prevención, la mejor forma de evitar el contagio y la propagación de esta zoonosis.
En la actualidad, el 99% de los casos de rabia humana se deben a la transmisión de un perro contagiado. Por ello, es de vital importancia el papel de los veterinarios en este panorama, pues son los encargados de erradicar la enfermedad con el control y cuidado de los animales para que, según está fijado en los objetivos de la Agenda 2030 por la organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Alianza Mundial para el Control de la rabia (GARC), no haya más muertes de personas contagiadas por el virus, que actualmente sobrepasa las 75.000 defunciones al año a nivel mundial.
El presidente del Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios, Fidel Astudillo, hace un llamamiento a los profesionales veterinarios, así como a la población en general, para que consideren la importancia de esta zoonosis en nuestra sociedad actual. No olvidemos el concepto de “One Health”, en el que para garantizar la salud de los humanos es imprescindible que los animales que conviven con nosotros estén sanos, ya que nuestra salud, la de los animales y la de nuestros ecosistemas están interrelacionadas.
La rabia es una enfermedad que se transmite a través de un virus altamente infeccioso, Lyssavirus, Rabdoviridae, y se contagia con la mordedura, la saliva o el arañazo procedente de un animal infectado.
Fidel Astudillo hace hincapié en el trabajo diario de veterinarios en la prevención y contención de la enfermedad para controlar y bajar las cifras actuales de rabia en todo el mundo. También resalta la labor de veterinario en la correcta identificación y registro de los animales, otra pieza clave en el control de las enfermedades.
La vacunación frente a la rabia en perros rompería la transmisión del animal al hombre y salvaría cientos de miles de vidas. Por ello, es necesario que todos los perros estén vacunados. También se debe seguir un protocolo de protección apropiado frente a esta enfermedad como detección precoz, vigilancia, valoración de riesgo y control de la enfermedad en animales salvajes.
"Los veterinarios deben tener un papel activo clave también en la educación ciudadana sobre los riesgos de esta enfermedad vírica. A través de campañas informativas, de conferencias, charlas, comunicados… evitando así la exposición innecesaria de personas a animales con rabia", reclama.
El Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios trabaja en primera línea de fuego en la Salud Animal y la Salud Pública para la prevención, control y erradicación de esta zoonosis.
Aunque nuestro país se considera libre de rabia, no dejamos de tener casos puntuales como el de Toledo en 2013 o el de Ceuta y Melilla en 2019-20, y otros que han aparecido en países europeos, en los que los perros infectados estuvieron o pasaron por nuestro país. Ello demuestra que nuestra situación no es segura 100%.
También nuestra frontera con Marruecos, donde hay rabia, hace que tengamos que estar alerta, siendo la vacunación de los animales la mejor medida para frenar un posible brote en Andalucía y España.
En la comunidad andaluza, en concreto, la vacunación antirrábica en perros, gatos y hurones se debe realizar de manera obligatoria a partir de los tres meses de edad de los animales, ser revacunados a los 30 días posteriores y, luego, volver a inmunizarlos todos los años.
Para concienciar sobre la incidencia de esta enfermedad y la importancia de su prevención, se celebra el 1 de junio el “Día Nacional de la Prevención contra la leishmaniosis”.
La leishmaniosis es una enfermedad parasitaria con carácter zoonótico. A día de hoy, según la Organización Mundial de la Salud, es la segunda enfermedad provocada por un protozoo más importante del mundo, solo superada por la malaria.
Esta enfermedad se transmite fundamentalmente a través de la picadura de los flebótomos, una especie de mosquito. En la mayor parte de las ocasiones, la transmisión se realiza de mosquito a perros, pero también puede afectar a otras especies humanos, gatos o hurones. Sobre esta última especie, se detectó recientemente y por primera vez en España, un animal positivo a leishmaniosis. Este hallazgo resaltó la importancia de estudiar el papel epidemiológico de los hurones en la transmisión de esta enfermedad.
En cuanto a la prevalencia de la enfermedad en los humanos, estiman que en España se han detectado 700 casos de leishmaniosis en los últimos años.
DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA
Frecuentemente asociada a climas mediterráneos, tropicales o subtropicales, el cambio climático está produciendo veloces cambios en el mapa nacional de la leishmaniosis. Así, en la cordillera cantábrica se han comenzado a detectar casos autóctonos de la enfermedad, donde nunca había sido endémica. Según un estudio realizado por MSD Animal Health, hasta un 2% de los perros de la región cántabra podrían estar afectados.
Otro estudio realizado sobre lobos salvajes de la montaña asturiana evidencia que hasta un tercio de estos animales son positivos a la enfermedad. Estos resultados ponen de manifiesto el imparable avance geográfico del parásito y la importancia del concepto “Una Sola Salud” en el abordaje de las enfermedades emergentes.
Por otra parte, en zonas históricamente vinculadas a esta enfermedad, se viene observando durante los últimos años un incremento preocupante en el número total de personas afectadas. En la comunidad valenciana, se estima que la media es siete veces superior a la media nacional, con 3,52 casos por cada 100.000 habitantes.
En otra región donde la leishmaniosis es una vieja conocida, Andalucía, un estudio revela que hasta un 10,12% de los perros son seropositivos a este parásito. En esta comunidad, es una enfermedad de declaración obligatoria debido a su alta prevalencia, y la tendencia alcista continua. En el 2019, la Red Nacional de Vigilancia de Salud Pública registró su pico máximo de tasa de infectados.
LA PREVENCIÓN ES FUNDAMENTAL
“Frente a enfermedades zoonóticas emergentes, la prevención es el mejor tratamiento”, afirman desde el Colegio de Veterinarios de Badajoz.
En este sentido, la vacunación constituye un pilar fundamental en el control de esta enfermedad, ya que permite crear una inmunidad de rebaño y limitar la propagación del parasito. Además, el protocolo de vacunación de esta enfermedad implica un testeo previo a la aplicación de la vacuna.” El testeo regular de los perros es clave para detectar portadores asintomáticos con capacidad de transmisión como hospedadores”, añaden los veterinarios.
Otro aspecto a tener en cuenta es el control del hospedador intermediario, es decir, el mosquito. La aplicación de antiparasitarios externos, como pipetas o collares, constituyen una herramienta importante para controlar la actividad de estos mosquitos sobre las mascotas.
Cabe recordar que el pico de actividad del flebótomo es de mayo a octubre, aunque este si las condiciones climáticas son favorables pueden actuar en otras épocas del año.
Las temperaturas muy elevadas pueden tener consecuencias graves, como el golpe de calor, que, sin una intervención rápida, puede llevar a la muerte del animal. Por ello, desde el Colegio de Veterinarios de Madrid (Colvema) ofrecen una guía para prevenirlo, detectar los síntomas y actuar en caso de producirse.
Los veterinarios recomiendan que la mascota tenga a su disposición agua fresca y limpia las 24 horas del día y comprobar periódicamente que quede agua en el bebedero y que no esté en pleno sol. “En verano es fácil que el agua evapore o simplemente se caliente y el perro deje de beber por eso. El agua no es importante solo en casa: no olvides llevarte agua cuando sales de paseo, vas de excursión o haces un viaje en coche con tu perro”, indican.
Como consecuencia del calor intenso, el animal puede reducir el apetito y las ganas de moverse. Se recomienda darle de comer en las horas menos cálidas del día, como a primera hora de la mañana o por la noche.
“Es muy importante que el perro tenga un lugar fresco y protegido del sol donde descansar, sobre todo en las horas más cálidas del día tanto en casa como si vive en el exterior y no conviene salir a pasear en las horas centrales del día cuando el calor es más extremo. El suelo de la calle, al estar muy caliente, puede dañarles las almohadillas y es frecuente que al dar paseos y correr a estas horas, puedan sufrir lipotimias. Además, como recomiendan muchos veterinarios en sus consultas, cuando saques a tu perro a pasear, aplica la "regla de los 5 segundos": ¿Aguantas tú 5 segundos el calor del asfalto poniendo el dorso de la mano sobre el suelo? Si no es así, a ellos les pasa igual en las almohadillas de sus patas, por lo que no es el momento de sacarlo y, si es necesario, se le debe pasear por donde haya césped o por el asfalto pero buscando algo de sombra, ya que pueden sufrir erosiones e incluso quemaduras en sus almohadillas”, advierten.
Por otra parte, recuerdan que nunca se debe dejar al perro en un coche con las ventanillas cerradas, ni siquiera si está a la sombra.
Respecto a los cortes de pelo en verano, “lo importante es dejar unos 2-3 centímetros aproximados de longitud ya que el pelo en parte protege del calor y de las quemaduras solares”.
Los perros no transpiran como los humanos, sino que lo hacen sólo a través de la boca dificultando mucho más su autorregulación de temperatura, puesto que se refrigeran únicamente a través de la respiración y del jadeo (se debe tener mayor precaución con ciertas razas, como son los boxer, carlinos, bulldogs, y cualquier perro de tipo braquicéfalo, es decir, con hocico corto o chato) y por ello son mucho más propensos al golpe de calor que los humanos.
Infografía elaborada por Colvema.
“Todo lo anterior es muy importante para prevenir el golpe de calor pero, si se produce, debemos estar atentos y detectar sus síntomas”.
Por último, el Colegio de Veterinarios de Madrid señala que, si el animal respira con dificultad y se niega a andar, lo primero es intentar bajar la temperatura lo antes posible. “Busca rápidamente una sombra, ofrécele agua si puede beber, y refréscale poco a poco (nunca de golpe en una bañera o con una manguera) hasta que se estabilice y retome una respiración normal. Si los síntomas o la situación son más graves, puedes empapar una camiseta en agua que lleves y aplicársela tipo paño húmedo en cuello y cabeza y llevarle urgentemente a un centro veterinario”.
© 2015 Centro Veterinario Castro, C.B. Avenida. Terra Chá, 46 (Residencial Terras do Lea) Castro de Ribeiras de Lea (Lugo) 982 310 589